lunes, 26 de julio de 2010

CUANDO CUBA ERA PURO MAMBO Y CHA CHA CHA

La Cuba dictatorial de Fulgencio Batista de los años cincuenta plagó la isla de terror y miseria. Con la irrupción de la televisión y el auge del cine cubano, la realidad de la sociedad cubana de la época fue desfigurada y distorsionada. Las mamboletas, negras y mulatas bailarinas, moviendo sus caderas al compas del ritmo caliente del bongó sugerían la idea que la Cuba entera era un bacanal. Bajo las luces de neón de los casinos y restaurantes se paseaban las mujeres bamboleando sus hermosos cuerpos incitando a la lujuria y al sexo comprado. ¡Puterío y juerga! Ese era el producto de exportación que la dictadura y la mafia norteamericana vendían en América Latina.

Esa era la Cuba de Batista hasta que llegó Fidel.

En la madrugada del 26 de julio de 1953 un grupo de valientes, dirigidos por Fidel Castro Ruz, intentaron tomar por asalto la segunda fortaleza del régimen batistiano. Cansados ya de tanta miseria y explotación no vacilaron en arriesgar sus vidas en aras de un mundo nuevo. En sus mentes estaban los miles de desempleados que pululaban las calles en busca de trabajo honrado y decente, los miles de campesinos iletrados que pasaban hambre en sus miserables bohíos, contemplado impotentes la lenta muerte de sus macilentos hijos. Los miles de obreros industriales, braceros, maestros y empleados exigiendo mejores sueldos y garantías laborales. En la mente de los héroes del Moncada estaba el pueblo de Cuba, el de Jose´Martí, Máximo Gómez y Antonio Maceo.

En su histórica y célebre defensa de los cargos imputados en la causa 37, el Doctor Fidel Castro Ruz no pidió su libertad. Tampoco clamó venganza por los setenta compañeros muertos en combate y a manos de los sangrientos torturadores. Sus vidas, dijo Fidel el día de su defensa, “…no tenían precio, no podrían pagarlas con las suyas todos los criminales juntos. No es con sangre como puede pagarse las vidas de los jóvenes que mueren por el bien de un pueblo; la felicidad de ese pueblo es el único precio digno que puede pagarse por ellas…”

Del asalto al cuartel Moncada hasta nuestros días han transcurrido 57 años. El pueblo cubano sigue bailando mambo, cha cha cha y rumba a pesar del bloqueo económico, a pesar de todos los obstáculos y dificultades de la revolución. Pese a todas las calamidades, los cubanos continúan intransigentes, con su música, ritmo y contagiosa alegría, marchando y moviendo sus cuerpos con maestría por los caminos del Che, Camilo y Fidel.


La felicidad del pueblo cubano la parió la madrugada del 26 de Julio en Santiago de Cuba.

¡Gracias Fidel por tu ejemplo! ¡Viva Cuba Libre!


Roberto Herrera 26.07.2010

2 comentarios:

  1. Buenas Roberto!! Dando una vuelta por Kaos me he encontrado con el enlace a tu blog. Llevo ya un rato leyendo y me encanta!. Agregado en mi lista de favoritos a quedado tu blog y te doy animos a que continues, muchas veces tan sabias palabras no caen en saco roto. Un abrazo desde Jaén (Andalucia). Salud!!

    Pablo Ortega

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  2. si, yo anduve por el malecón habanero, por el acuarium, por la heladería coppelia, miramar, vibora, y a pesar de las dificultades, las cubanas, se mueven, bailando, ¡sin musica!la picardía está a flor de piel.

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