Según se lee en los libros de historia universal, el oráculo de Delfos, fue un gran recinto sagrado en la antigua Grecia, al pie del monte Parnaso y dedicado principalmente al dios Apolo, al que acudían las personalidades griegas más conspicuas y díscolas de la época, para consultar a los dioses sobre variados temas relacionados con la intríngulis político-militar y social de la época. En ese lugar, Sibila, la Pitonisa madre, les hablaba de manera sibilina, incluso para decirles cosas sin importancia, remarcando de esa manera lo misterioso de sus predicciones.
Los oráculos modernos en la era de la cibernética, son las páginas web informativas, periódicos digitales y las bitácoras. Sitios donde se dan cita virtualmente aprendices y supuestos maestros de las artes de la predicción y prestidigitación mundial. Entre muchos, hay uno que se destaca por su arrogancia y soberbia en sus profecías: Professor Heinz Dieterich.
Hochmut kommt vor dem Fall, reza un proverbio alemán y que equivaldría al castizo de: “cuanto mayor es la subida, tanto mayor la caída”, aunque en la connotación alemana el énfasis está en la cualidad de “ser arrogante”. En su artículo publicado en Aporrea el día 12 de abril del 2011, Dieterich pronostica: “Hugo Chávez, Fidel, Evo y Correa no construirán el Socialismo del Siglo XXI”, título al que yo le agregaría la coletilla de “gracias a Dios”, puesto que detrás de las “teorías científicas del S21” se esconden las ideas añejas del revisionismo de Eduard Berstein y Karl Kautsky* . El Herr Professor Dieterich se explaya a sus anchas en su aval, arrogándose a motu proprio, la potestad de decidir lo que es importante y superfluo para el público lector. Lástima que no nombró a los supuestos diez revolucionarios de América Latina, entre los que se encuentran cuatro excombatientes populares de cuatro países, los cuales han remarcado el carácter “histórico-estratégico” del ensayo, en el cual el Professor Dieterich devela “científicamente” la traición a la revolución socialista del siglo XXI por parte de los cuatro líderes latinoamericanos mencionados en el título de su artículo. Dando rienda suelta a mi imaginación, no sería nada sorprendente y extraordinario que Joaquín Villalobos y Teodoro Petkoff, ambos excombatientes guerrilleros, formen parte del grupo de los asesores consultados.
“Las mentes más preclaras de la humanidad”, escribe Dieterich, y se supone que el modesto Herr Professor se autoincluye en el grupo de los Illuminati, “han recalcado enfáticamente que la esencia del socialismo es la autodeterminación democrática de los ciudadanos”, es decir aquel momento histórico, en el que el “pueblo y los científicos”, ayudados por la vanguardia estatal verbi gracia, Hugo Chávez, Fidel, Evo y Rafael Correa, toman en sus manos las riendas de la historia y dan el salto cualitativo a la sociedad socialista del siglo XXI. Todo esto ocurrirá, según Dieterich, sin lucha de clases y lo que es peor, sin resolver la contradicción fundamental del capitalismo: capital-trabajo. Esto, lieber Herr Professor Dieterich, de teoría científica marxista, no tiene nada. ¡Es caca en celofán!
Los títulos y credenciales académicas no son ninguna garantía de la validez de los planteamientos teóricos. Sí. Impresionan y distinguen a quien los ostenta, pero los “apantalladores”, término centroamericano de farolero (der Möchtegern), en algún momento caen por la fuerza de la gravedad, como la fruta madura. Pierden la credibilidad y caen en desgracia debido a la gravedad de su enfermedad. El delirio de grandeza es una perturbación psíquica** , y quien adolece de ella, sólo pretende provocar y llamar la atención con su lenguaje bífido y contradictorio. La mejor medicina para curarse de estos pitonisos narcisistas con pedigrí, es simplemente ignorarlos, no tomarlos en cuenta. Sigamos pues, el ejemplo del Comandante Fidel Castro, Hugo Chávez, Evo Morales y Rafael Correa, que no gastan pólvora discutiendo con el ciudadano Heinz Dieterich, puesto que hay cosas más importantes que hacer en la construcción del verdadero socialismo en sus respectivas sociedades.
Sencillamente el Professor Dieterich no está en la agenda de Fidel y eso, sí que le saca roncha al alma ególatra del académico alemán.
Roberto Herrera 15.04.2011
*:Para mayores detalles léase a Lenin: Marxismo y Revisionismo, La revolución proletaria y el renegado Kautsky, Materialismo y empiriocriticismo
**:Para mayores detalles léase a S. Freud et al.
No hay comentarios:
Publicar un comentario